Comisiones Obreras de Cantabria | 28 marzo 2024.

DELEGADXS: LA FUERZA DE CCOO EN CANTABRIA

Miguel Ángel Expósito: La satisfacción del deber cumplido

    05/01/2021.
    Miguel Ángel Expósito, delegado de CCOO en Ambuibérica

    Miguel Ángel Expósito, delegado de CCOO en Ambuibérica

    Miguel Ángel Expósito hace ya tiempo que decidió dar un golpe en la mesa y cruzar la línea que separa el mundo del miedo al despido, a la empresa, para afiliarse a ese otro mundo que lucha por defender unos derechos laborales que ha costado mucho conquistar y a los que no está dispuesto a renunciar.

    Tras casi dos décadas trabajando en el transporte sanitario de Cantabria, fue hace unos siete años cuando decidió afiliarse a un sindicato y comenzar una lucha que le ha traído hasta Comisiones Obreras, una organización que en las últimas elecciones de Ambuibérica, la empresa para la que trabaja, ha conseguido pasar de 0 a 3 delegados en un Comité de Empresa de 13 miembros.

    “Nos hemos quedado a 15 y 30 votos de los sindicatos que han sacado la máxima representatividad dentro de un comité muy dividido, con presencia de cuatro sindicatos. Somos una plantilla de alrededor de 450 personas pero el volumen que va a votar en una empresa como la nuestra tampoco es excesivo y la verdad es que estoy muy orgulloso del resultado”, señala Miguel Ángel Expósito.

    ¿Por qué los compañeros han dado su voto de confianza a CCOO? Expósito lo tiene claro: “Yo creo que los compañeros necesitaban un cambio y es precisamente lo que nosotros ofrecemos. Nos estamos esforzando mucho para que desde el minuto 1 se enteren de todo lo que pasa en la empresa. Damos toda la información y también nuestra opinión y luego ya que cada uno saque sus conclusiones”.

    Han hecho de Facebook principalmente, pero también de otras redes sociales, su principal aliado. El sitio donde cuelgan todo lo que acontece en la empresa y que puede afectar de una u otra manera a la plantilla porque han considerado que es el mejor instrumento para llegar al máximo número de personas.

    Y esa política de comunicación les es muy eficaz. “Hemos notado que los y las compañeras nos vienen a pedir información, incluso afiliados a otros sindicatos, pero nosotros estamos aquí para ayudar a todo el mundo, no pensamos detrás de qué siglas están o a quién pagan cada vez”, apunta Expósito.

    Este técnico de emergencias sanitarias (TES) está muy orgulloso de su trabajo como delegado, un cargo al que llegó de forma “un poco circunstancial”. “Mi padre fue enlace sindical hace más de 20 años y salió escaldado. Yo era un poco reticente pero llega un momento en el que ves que la única manera de defender y luchar por un trabajo que además te gusta es esta. Teníamos muchísimos problemas con la empresa, que no respetaba convenios, ni contratos con la administración… al final todo afecta al funcionamiento de la empresa y ves que el único camino es meterte dentro e intentar cambiar las cosas desde dentro, desde la acción sindical y la negociación que nos brinda el estar en el Comité de Empresa. Veo que el trabajo tiene resultados”, dice.

    Los logros y éxitos sindicales han sido muchos y variados. En CCOO, al no tener representación hasta hace unos meses, se ha hecho todo desde fuera pero su acción ha sido fundamental para acelerar el proceso y comenzar a presentar demandas y denuncias ante la Inspección de Trabajo por los atropellos cometidos por la empresa. Así, han conseguido cancelar una modificación sustancial de las condiciones de trabajo que hasta el juzgado ha entendido que fue una represalia tras reclamar unas cantidades de dinero que les adeuda la empresa, que les den la razón cuando afirmaban que Ambuibérica no les había proporcionado los medios de protección adecuados durante la primera ola de la pandemia u otras relacionadas con reclamaciones económicas, de excesos de jornada, etc.

    No obstante, Expósito sí señala un éxito 100% de CCOO: una sentencia que considera a un compañero agredido como agente de la autoridad a la hora de la condena.

    Es consciente de que la pandemia del coronavirus ha supuesto un antes y un después por los problemas graves de seguridad que han tenido y la falta de protocolos de actuación. Sin embargo, más allá de los problemas laborales de los 450 trabajadores y trabajadoras de Ambuibérica, Expósito recalca que el problema de fondo es social, “a pesar de que hay quien quiere encasillarlo como un conflicto laboral”, pero realmente “hablamos del transporte sanitario, de tratar con enfermos, con personas que necesitan de nuestra ayuda. Ahora mismo somos la primera línea, somos esenciales y vamos a los domicilios donde posiblemente esté la gente que ha contraído el virus.

    El ‘Grinch’ de los aplausos

    “Soy el Grinch de los aplausos porque yo en lo que creo es en el reconocimiento de la profesión y, en nuestro caso, ni siquiera estamos reconocidos a nivel laboral como sanitarios. No somos solo transportistas porque atendemos y curamos a los pacientes accidentados o incluso les ofrecemos una cierta terapia psicológica”, reivindica Expósito.

    Por eso, es necesario que los y las compañeras se afilien a un sindicato. “Es una herramienta imprescindible para cualquier problema que surja. En el mundo hospitalario, por ejemplo, es impensable no estar afiliado”, dice Expósito, que dice que una de sus tareas es “concienciar a los y las compañeras de que se trata de una inversión y no de un gasto”.

    No en vano, él mismo vivió en sus carnes el telón de acero de la empresa cuando le despidieron por hacer públicas sus reivindicaciones, por luchar por sus derechos. “El despido se declaró nulo y me volvieron a admitir pero ahí ví lo importante que es pertenecer a una organización”, confiesa.