Comisiones Obreras de Cantabria | 27 abril 2024.

8M

Mujeres de CCOO, sindicalismo en lucha activa

  • El sindicato, coincidiendo con el 8 de marzo, ha organizado una jornada sindical con delegadas en sectores considerados esenciales durante la pandemia y con delegadas al frente de conflictos laborales
  • Ha participado una enfermera de la UCI, una cajera de supermercado, una funcionaria del INSS, una conservera, dos cuidadoras de Aspace, una gerocultora y una trabajadora del vertedero de Meruelo

08/03/2022.
Un momento de la jornada

Un momento de la jornada

Son Alexandra, Yasmina, Paqui, Teresa, Sheila, Yolanda y dos Silvias. Sus nombres son importantes porque ellas han sido hoy las protagonistas de la jornada sindical que se ha celebrado en el salón de actos de CCOO de Cantabria bajo el título ‘Mujeres de CCOO: La acción que derriba barreras’ y coincidiendo con el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres.

Ellas han sido las encargadas de ser el altavoz de muchas otras, de decenas, de cientos que desde sus centros de trabajo, desde sus puestos, en su labor como delegadas, luchan día a día, de forma activa y sin parangones, por conquistar derechos, por alcanzar esa igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres que, bien avanzado el siglo XXI, continúa siendo una utopía, con brechas salariales, laborales o de género que se reducen lentamente, que están a años luz de desaparecer aunque, aún así, tenemos que celebrar cada avance.

Rosa Mantecón, secretaria general de CCOO Cantabria, ha sido la encargada de inaugurar una jornada que ha sido moderada por Laura Lombilla, secretaria de Empleo del sindicato, y donde ha colaborado la Consejería de Industria, Turismo, Innovación, Comercio y Transporte.

Mantecón, durante su intervención, ha destacado el “imprescindible papel de las mujeres en sectores esenciales y también respecto a los cuidados” durante la pandemia y también ha hecho hincapié en el “papel igual de fundamental de las mujeres que lideran la acción sindical”. De ahí que desde la organización se haya querido sentar en un acto sindical a varias de esas mujeres en un día tan señalado como hoy porque “sigue siendo imprescindible que nos movilicemos y que trabajemos cada día para combatir la situación de desigualdad que sufrimos las mujeres en el ámbito laboral y para denunciar la violencia machista que sigue asesinando mujeres cada día”.

La secretaria general de CCOO ha subrayado, coincidiendo con el 8 de marzo, el papel fundamental de las CCOO en los dos últimos años, sacando adelante los decretos de planes de igualdad e igualdad retributiva, la mejora del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que sobretodo empuja el crecimiento de los salarios de las mujeres, y la reforma laboral, “que también incidirá en la mejora de nuestras condiciones con más estabilidad y mejores salarios”.

Además, ha resaltado que las mujeres para esto han sido imprescindibles, porque también “avanzamos en el sindicato”, con más mujeres organizadas en CCOO, “porque ya llegamos a todos los niveles de responsabilidad y, además, “somos las que hemos generado el incremento afiliativo del último año”.

El acto ha continuado con la participación de delegadas en sectores de los denominados esenciales durante la pandemia. Así, Silvia Mazas, enfemera de la UCI en el Hospital Marqués de Valdecilla, ha relatado cómo fueron esos primeros momentos de incertidumbre del inicio de la crisis sanitaria que, además, en su caso, coincidieron prácticamente con su primer paso como delegada sindical. “Fue muy complicado y con mucha intervención sindical para que no faltaran EPI y se cumplieran los protocolos”. Un trabajo duro plagado en los primeros momentos de aplausos y elogios que, sin embargo, “luego se olvidan” y dan paso a una “sociedad y a unos pacientes cansados tras dos años de pandemia” y que consideran que “no reciben los cuidados necesarios”.

Sheyla Ruiz, por su parte, delegada de CCOO por Supermercados Día, ha reconocido durante su participación que “los primeros momentos fueron muy complicados: sin EPI y solo contando con la generosidad de la gente que nos traían mascarillas confeccionadas de forma casera”. Para Ruiz, “hicimos un trabajo sindical muy bueno como nos lo han reconocido los y las compañeras en las elecciones sindicales, donde hemos conseguido cuatro delegados más”.

El primer bloque, centrado en las mujeres trabajadoras en sectores esenciales durante la pandemia, lo ha cerrado Yasmina Flores, delegada del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), que se ha referido al brutal atasco que se produjo al inicio de la pandemia cuando el personal no daba abasto con los expedientes que tenía que tramitar. “Trabajábamos desde casa pero tuvimos mucha carencia de medios y, a pesar de todo, el personal se volcó porque después de cada expediente había una persona”.

En este sentido, ha reivindicado más medios y más personal, pues sigue siendo una de las asignaturas pendientes de la administración pública, ha dicho.

Mujeres al frente de la acción sindical

La primera en intervenir en el segundo bloque ha sido Paqui Pereda, conservera y delegada por CCOO en Consorcio, que ha narrado el conflicto que mantiene el sector en los últimos meses por conseguir un convenio justo y equitativo que iguale, de una vez por todas, las categorías de los grupos 5 y 6.

“Es una reivindicación histórica de CCOO y yo llevo luchando por ello desde hace 28 años, que es el tiempo que llevo como delegada”. Pereda ha señalado que “después de 42 años sin huelgas hemos salido a la calle y la respuesta de las compañeras ha sido espectacular”. “Creíamos que lo teníamos” pero los otros sindicatos han firmado un preacuerdo que trunca sus expectativas y, “aunque nos hemos quedado solas en la lucha, seguiremos, porque nosotras somos las que damos el valor añadido a las anchoas y las fábricas tienen que entrar en el siglo XXI“.

Después, Yolanda Incierte, delegada de CCOO en la residencia Lusanz, ha compartido su agria experiencia desde que decidió dar el paso como representante de CCOO en su centro de trabajo. “El primer reto fue convocar elecciones y después de eso comenzaron las represalias, las sanciones, los expedientes disciplinarios… Ha sido un acoso y derribo tanto en lo laboral como en lo personal pero estoy orgullosa de haber conseguido que, al menos, comience a respetarse el convenio en algunos aspectos y se vaya cumpliendo.

En el caso de Alexandra Gómez y Alicia Trueba, su experiencia sindical es reciente. Llevan poco más de un año como delegadas en Aspace y ya conocen lo que es enfrentarse judicialmente a la empresa tras meses de infructuosa negociación. La justicia les ha reconocido el derecho a descansar un fin de semana completo al menos una vez al mes a las personas que trabajan en la residencia y, aunque la empresa ha recurrido, ellas están satisfechas de lo conseguido. Ahora están trabajando en el Plan de Igualdad y “luchando por pensamientos que no van acordes con la actualidad, que son de otra época, muy alejados del ritmo actual de la sociedad”.

Por último, Teresa Gutiérrez, delegada de CCOO en TIR (vertedero de Meruelo), que consiguió paralizar una huelga convocada tras alcanzar un acuerdo con la empresa, ha hecho hincapié en la negativa de la empresa de dar la oportunidad a las mujeres de poder elegir en qué puesto estar. “Cuando entras te mandan directamente a la cinta y no tienen en cuenta tu cualificación, tu capacitación para hacer otro trabajo. Ese es mi mayor logro, que las compañeras quiten el miedo a tener la opción de elegir”.